Las historias de don Florentino Pérez, capo di tutti capi
Publicado: 01 Jun 2019, 19:08
Estaba mirando qué serie ver para combatir la resaca y es que no podía dejar de pensar que nada en la ficción va a superar (bueno, igual sí pero poco) lo de este prohombre de la España millenial o como cojones se llame ahora esta cosa en la que vivimos.
Puede que alguno no se haya enterao de la última aparición pública de El Emperado de ACS (al menos la última de la que tengo conocimiento aunque a partir de ahora voy a seguirlo con más interés aún si cabe para elogiarlo aqui en la medida de mis posibilidades que no será ni una décima parte de lo que se merece). Fue tremenda, formidable, fantástica tú, que decía Punset. Posiblemente como todas las suyas, lo que pasa que no me entero porque evidentemente no estoy a esa altura.
Bueno, el tema. El tipo hizo uno de estos días atrás una entrevista con el de la Morena (que no es que no supiera que seguía con su programa, es que hasta me sorprendió que aún estuviera vivo. Pensaba que ya se le había ido la mano en alguna orgía de esas guarras que debe hacer y un castor le había comido entero desde el ojete). Pues resulta que en esa entrevista, siempre en su monótono tono de jesuita sicópata, el tipo dijo, sin darse importancia, como hacen los grandes y elegidos que no precisan ni levantar la voz ni imponerse con ridículos aspavientos, que Sergio Ramos (serrecuatro) había ido a pedirle su manumisión para largarse a la China a por un porrillón de millones y así poder permitirse un Rolls Royce con brillantina que le hace mucha ilusión a su churri. Es que me descubro el cráneo, coño. Un puto genio. Con que aplomo destroza toda forma de vida a su paso. Un elegido, hostia. Don Florentino, eh, está claro, no el otro memo.
Y es que es bestial, implacable, asqueroso y adorable de manera asimétrica. Vamos que a mí me parece bastante más asqueroso que adorable pero sí tiene cierto punto estético cimentar lo complejo desde lo simple. Una frase, una simple frase, y las puertas del infierno se abren de par en par. Y me juego un güevu, sin que tenga la necesidad ni de levantar un teléfono para ponerlo en marcha. Todo su amplio séquito de esbirros sabe que El Cesar castizo ha bajado el pulgar. Toca atizar sin piedad hasta la exterminación como ser humano digno del imbécil de Camas. Y así fue, en dos días arribabajo salía el tío solo, a una sala secundaria y fijo que incómoda de Valdebevas (también Baldevebas), en público escarnio, ante la recua pelotillera soltando flashes a una velocidad que el ojo humano es incapaz de captar, a decir que perdón que lo sentía que él jamás se iría del madrid que jugaría aunque fuera gratis y que esperaba dar un abrazo, por favor, a Florentino el Magno en su boda, que al parecer el muy anormal y hortera se casa. Incluso para una cucaracha como el capi de todas las Españas que a todas luces se merece cualquier humillación pública y privada que le puedan causar, la vergüenza ajena que provocó su lamentable y balbuceante súplica, resultó difícil de soportar por momentos. Estabas ahí oyéndolo entre la pena, el asco y el deleite ante la obra de El Califa que no del califa.
Y barrunto yo que toda este frenético desencadenamiento de los acontecimientos debe ser culpa del twitter. Que el Ramos entraría en su cuenta y se encontraría fotos de sus hijos decapitados que haya hecho algún chaval por la broma y las risas y cuando en su casa consiguieron que saliese de debajo de la cama solo pudo que correr a postrarse como hizo. Luego se dió un garbeo por su cuadras a ver si había algún caballo sin cabeza. Y es que hace años, con los medios de comunicación tradicionales esto hubiera sido mucho más mejor. Con la maquinaria mediática al servicio de El Gato entre los Gatos echando mierda por esas bocas hedionadas de lameculos y miserables y con el Ramos defendiéndose en plena etapa de negación gracias a las columna de opinión de algún coleguita oligofrénico nada interesado en fichajes.com. El puto twitter, qué asco, es como si tienes ante ti un polvo tremendo de mínimo hora y tres cuartos (jajaja) y te tienes que contentar con cascártela en dos minutos. Puta mierda todo, coño.
Habrá nuevas entregas.
Puede que alguno no se haya enterao de la última aparición pública de El Emperado de ACS (al menos la última de la que tengo conocimiento aunque a partir de ahora voy a seguirlo con más interés aún si cabe para elogiarlo aqui en la medida de mis posibilidades que no será ni una décima parte de lo que se merece). Fue tremenda, formidable, fantástica tú, que decía Punset. Posiblemente como todas las suyas, lo que pasa que no me entero porque evidentemente no estoy a esa altura.
Bueno, el tema. El tipo hizo uno de estos días atrás una entrevista con el de la Morena (que no es que no supiera que seguía con su programa, es que hasta me sorprendió que aún estuviera vivo. Pensaba que ya se le había ido la mano en alguna orgía de esas guarras que debe hacer y un castor le había comido entero desde el ojete). Pues resulta que en esa entrevista, siempre en su monótono tono de jesuita sicópata, el tipo dijo, sin darse importancia, como hacen los grandes y elegidos que no precisan ni levantar la voz ni imponerse con ridículos aspavientos, que Sergio Ramos (serrecuatro) había ido a pedirle su manumisión para largarse a la China a por un porrillón de millones y así poder permitirse un Rolls Royce con brillantina que le hace mucha ilusión a su churri. Es que me descubro el cráneo, coño. Un puto genio. Con que aplomo destroza toda forma de vida a su paso. Un elegido, hostia. Don Florentino, eh, está claro, no el otro memo.
Y es que es bestial, implacable, asqueroso y adorable de manera asimétrica. Vamos que a mí me parece bastante más asqueroso que adorable pero sí tiene cierto punto estético cimentar lo complejo desde lo simple. Una frase, una simple frase, y las puertas del infierno se abren de par en par. Y me juego un güevu, sin que tenga la necesidad ni de levantar un teléfono para ponerlo en marcha. Todo su amplio séquito de esbirros sabe que El Cesar castizo ha bajado el pulgar. Toca atizar sin piedad hasta la exterminación como ser humano digno del imbécil de Camas. Y así fue, en dos días arribabajo salía el tío solo, a una sala secundaria y fijo que incómoda de Valdebevas (también Baldevebas), en público escarnio, ante la recua pelotillera soltando flashes a una velocidad que el ojo humano es incapaz de captar, a decir que perdón que lo sentía que él jamás se iría del madrid que jugaría aunque fuera gratis y que esperaba dar un abrazo, por favor, a Florentino el Magno en su boda, que al parecer el muy anormal y hortera se casa. Incluso para una cucaracha como el capi de todas las Españas que a todas luces se merece cualquier humillación pública y privada que le puedan causar, la vergüenza ajena que provocó su lamentable y balbuceante súplica, resultó difícil de soportar por momentos. Estabas ahí oyéndolo entre la pena, el asco y el deleite ante la obra de El Califa que no del califa.
Y barrunto yo que toda este frenético desencadenamiento de los acontecimientos debe ser culpa del twitter. Que el Ramos entraría en su cuenta y se encontraría fotos de sus hijos decapitados que haya hecho algún chaval por la broma y las risas y cuando en su casa consiguieron que saliese de debajo de la cama solo pudo que correr a postrarse como hizo. Luego se dió un garbeo por su cuadras a ver si había algún caballo sin cabeza. Y es que hace años, con los medios de comunicación tradicionales esto hubiera sido mucho más mejor. Con la maquinaria mediática al servicio de El Gato entre los Gatos echando mierda por esas bocas hedionadas de lameculos y miserables y con el Ramos defendiéndose en plena etapa de negación gracias a las columna de opinión de algún coleguita oligofrénico nada interesado en fichajes.com. El puto twitter, qué asco, es como si tienes ante ti un polvo tremendo de mínimo hora y tres cuartos (jajaja) y te tienes que contentar con cascártela en dos minutos. Puta mierda todo, coño.
Habrá nuevas entregas.